Nunca es suficiente.
Hace años que esa frase acompañaba todas sus acciones, todas sus ideas...todo su ser.
Impulsado por un retorcido masoquismo, caminó hacia el espejo en el baño de su actual habitación y se contemplo evaluadoramente.
Hermoso, pero no tanto como Tom
Pálido, pero no tanto como los de su “especie”
Vivo, pero no lo sufriente para ser humano
Y definitivamente no se sentía inmortal.
Era el maldito gemelo defectuoso de la familia líder en el clan de bebedores de sangre, vulgarmente dicho “Vampiros”
Desde que llegaron a los dieciocho años, Bill presenció como las habilidades de su estirpe se manifestaban en su gemelo, mientras él se conservaba tan humano y frágil como siempre. Esto en sí, no le afectaba, pero el cuerpo de su hermano no parecía ser el único con cambios pues poco a poco su relación se deterioró. Y de ser inseparables, siempre contándose y viviendo todo juntos, ahora no podían estar en la misma habitación sin asesinarse con los ojos.
No podían ser amables el uno con el otro, o felices juntos...no desde que Tom se convirtió en uno de “Ellos”
Con tristeza clavó sus ojos en los del reflejo que tenía frente a sí, era como una broma de lo que antes tenía. Pensar que hacía un año, aún correteaba por su casa de nacimiento al lado de su clon, entre lecciones y gentes del clan que les visitaban esperando el momento en que surgiera la metamorfosis y los gemelos subieran al poder.
Pero no, una mañana, Tom despertó gritando que le ardían mucho los ojos y los hombres del consejo inmediatamente supieron que hacer, se lo llevaron a una habitación vacía y sin luz de ningún tipo. Tres días pasó Bill sin saber que pensar, cuando le permitieron volver a ver a su gemelo, este estaba mas guapo de cómo lo recordaba, cosa que no creyó posible, estaba mas pálido de lo usual, y juraría que sus ojos castaños iguales a los suyos, tenían un tinte rojizo. Sin embargo, cuando Tom le vio, corrió a abrazarlo con el mismo cariño y protección de siempre.
De haber sabido que sería la última vez que recibiría un abrazo así en mucho tiempo, lo hubiera disfrutado más.
Después de eso, las cosas empezaron a caer. Todo el clan esperaba el día en que Bill comenzara con los cambios también, él estaba ansioso. Desde siempre él y su hermano lo habían esperado, sin embargo, el cambio nunca ocurrió. Simplemente Tom se cansó de esperarlo, y empezó a dirigir él solo, cada vez tuvo menos tiempo para ser hermano, y al final...los gemelos Kaulitz se dividieron.
Esos dos últimos años después de la transformación de Tom, todo había sido caótico, se mudaban de un lugar a otro para no llamar la atención de los humanos, Bill empezaba a detestar las mansiones ancestrales que escogían como cuarteles, y el hecho de que todos los del clan se le quedaran viendo por una razón que él muy bien conocía.
Por que era una carga inútil, un error, por que a diferencia de su gemelo, el jamás sería como Ellos
Posiblemente si no fuera por su madre, que hizo prometer a Tom que siempre lo protegería, ya hasta se abrían desecho de él.
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