Dont let Go. Cap 9

BILL POV
Las palabras de Tom, me aturdieron casi lo dejo caer mientras lo sujetaba para llevarlo al baño, el había dicho “novio”, acaso el sabia algo de Markus, pero no había nada entre el y yo, Markus me quería pero yo le había pedido tiempo, como demonios sabia Tom de eso, acaso Andreas le dijo algo, bueno eso era lo menos importante en este momento, ahora tenia que hacer que se le bajara la borrachera si David se enteraba no se que haría, Andreas me había dicho esta tarde donde había estado Tom estas dos semanas, me dijo todo lo que le paso, lo que el alcohol le había hecho, me sentí tan impotente por no haber estado con el, aunque supongo que a el le hubiera dado igual el no quería verme, pero eso no me importaba ahora lo que quería era verlo bien.
—Dices cosas sin sentido, vamos ayúdame a levantarte, por favor Tomi—fue entonces cuando me ayudo se levanto pero estaba tan borracho que perdía el equilibrio, entre tambaleos fuimos a dar los dos al suelo cayendo el sobre mi, casi me dejo sin aire—Tom levántate, no puedo respirar—Pero solo se movió para quedar frente a mi, pude respirar pero el aun estaba sobre mi, con ambas manos a mis costados.
—Billy… por favor… perdóname…—sus ojos se fijaron en los míos llenos de tristeza
—Tom me aplastas muévete… —Yo no podía verlo desvié la mirada, lo que había hecho desde que volví fue evitarlo, no me sentía listo para tenerlo frente a frente mi corazón si es que aun quedaba algo se sentía demasiado herido no creí soportar volver a estar cerca de el, por que cuando lo veía solo podía recordar su mirada de odio aquella mientras me gritaba que le daba asco eso me dolía y me hacia quedarme sin respiración, pero por que me pedía perdón, bueno supongo que el alcohol lo hace decir todas estas tonterías, pero algo que yo no puedo negar es esa mirada llena de dolor que sus ojos me mostraban, me sentía estúpido por que a pesar de todo seguía amándolo, de nada había servido el haberme alejado de el, si aquí estaba de nuevo perdido en esos ojos que me hacían creer otra cosa que no era verdad—Apestas a alcohol
—Que… y eso te da asco… por que no mejor… dices la verdad… por que… con Markus si… te dejas besar…—Mierda supongo que nos vio pero de que hablaba si yo solo le dije que olía a alcohol no dije nada de ningún beso
—Basta ya deja de decir tonterías, y párate
—Yo también se besar—Pero antes de que le dijera algo mas siquiera de que me dejara reclamarle, impacto sus labios con los míos de manera violenta, ¿Qué era esto? De verdad Tom estaba tan borracho que no sabia que hacia me revolví debajo de el para zafarme pero fue en vano cerro sus manos alrededor de las mías poniéndolas sobre mi cabeza sujetándola con solo una de las suyas y con la otra tomando mi cabeza para pegarme mas a el, me sentía tan enojado de seguro estaba imaginando que era una de sus conquistas el alcohol lo hacia desvariar no hice nada deje que siguiera su jueguito hasta que se separo mirándome a los ojos.
—Eres un imbécil, suéltame ya
—¿Qué… no te… gusto?... o ya se es… por que yo no… soy el verdad
—Tom estas borracho no sabes lo que haces y me estas lastimando suéltame
No lo hizo en cambio me apretó mas las manos y me susurro al odio “yo puedo hacerte olvidar los besos de el”, de nuevo sus labios se unieron a los míos pero esta vez delicadamente yo no quería seguir con esto, me hacia daño no solo físicamente sino por que sabia que esto lo estaba haciendo solo por que estaba borracho y mañana cuando estuviera en su sano juicio iba a volver a ser el mismo de siempre aquel que me odiaba el me lo había dejado bien claro lo que sentía por mi “asco”, a pesar de que me movía para zafarme el no detuvo su tarea, por solo un segundo me deje llevar y esto basto para que el lo notara, mi respiración era entrecortada, mi corazón latió con tanta fuerza que pensé que se me saldría del pecho, fue como si le devolvieran la vida, y entonces cedí, mis labios le dieron paso a los de Tom, le bese como si en eso se me fuera la vida, moviendo mis labios al compas de los suyos, era una sed, sed de sus labios de necesidad de sentirlo mío, sed de el, su lengua se apodero de mi boca jugueteando con mi percing a pesar de el olor a alcohol, el sabor de Tom me hacia desvariar, sabia que esto estaba mal que el solo lo hacia por los efectos de la borrachera pero por que no hacer lo que mis sentidos me decían, me deje llevar le mordí el labio jalando de su percing, dio un leve quejido, pero siguió con su labor de adueñarse de mi boca, cosa que ya no tenia que hacer pues yo estaba mas que dispuesto a concederle lo que el quería, el lo supo pues soltó mis manos, para rodear mi cintura y yo rodear su cuello para atraerlo mas a mi nada era suficientemente cerca, Tom con agilidad subió su mano por debajo de mi playera acariciando mi espalda obligándome a pegarme mas a el, con la rodilla abrió ligeramente mis piernas quedando en medio de mi, cada caricia cada beso, me extasiaba sentía el calor recorrer mi cuerpo, millones de sentimientos, de deseos, cuantas veces no soñé con esto con poder sentirlo mío y solo mío por que negarme el placer de cumplir mi sueño, mi mente decía no pero mi cuerpo gritaba SI seguí lo que me hacia sentir mejor, Tom separo sus labios de los míos siguiendo el camino de mi mandíbula a mi cuello sus rastas me hacían cosquillas fue como si recibiera una descarga eléctrica, un cosquilleo revoloteaba en mi estomago, un gemido salió de mis labios algo que no esperaba pero pude ver a Tom sonreír yo por mi parte me dedique a sentir su cuerpo por debajo de esa enorme camisa su piel quemaba el sentía lo mismo que yo me encargue de memorizar con mis manos cada centímetro de la piel de su espalda, mis manos la recorrían con ansias, volvió a mis labios, gotas de sudor recorrían mi cara y la de Tom saboree cada espacio en su boca, debía de estar en el mismo cielo o había muerto y estaba en el infierno daba igual no podía pedir mas, Tom volvió a alejarse de mi mientras mis labios le buscaban con ansias, pero mis mejillas se sintieron mas acaloradas y podría jurar que se habían velto rojas cuando lo sentí subir lentamente mi playera y marcar un camino de besos de mi pecho hasta mi tatuaje de estrella donde se detuvo marcando el contorno, el placer de esos besos me hacia retorcerme en el suelo no me importaba nada ya solo quería sentirlo así besarlo tocarlo, cuando sus manos se dirigieron a mi pantalón intentando quitarme el cinturón solté un pequeño gemido de placer.
—Me vuelves loco… tus caricias… eres tan… frágil… te voy a hacer olvidarlo… yo hare que no quieras, que no necesites a nadie mas que a mi… borrare cada beso que el te da.
De que mierda estaba hablando, olvidar ¿a quien? Que no quiera a quien, de que me habla… quien se pensaba que soy una puta de esquina barata que se acuesta con cualquiera, es que no había cambiado nada seguía siendo el mismo de siempre, aquel que puede tener a quien sea a sus pies, esto no lo hacia por mi lo hacia por su maldito orgullo de macho, por no ver que le ganaban a la chica o en este caso a mi, además no se como deje que esto llegara tan lejos era obvio que estaba borracho hacia cosas de las que mañana ni siquiera se acordaría y de las que me culparía, no le basto el daño que me hizo, pero esta vez no lo dejaría seguir y volver a lastimarme, como pude lo empuje mientras me miraba desconcertado, no se de donde me sostuve pero me levante del suelo dejándolo ahí tirado.
—Se acabo Tom, no soy otra de tus zorras a la que puedas cogerte cuando tienes ganas
—Bill… no… yo no…
—No me importa nada, no te parece que ya hiciste suficiente, mírate ¿Dónde quedo el gran Tom Kaulitz? El que podía tener a cualquiera a sus pies, ¿y ahora quiere tirarse al maricon de su hermano? Lo recuerdas… eso me dijiste cuando te dije que te amaba “maricon” eso soy para ti no, estas borracho y no sabes ni quien eres ya tuve suficiente de ti, déjame en paz querías que ya no fuéramos hermanos eso hice yo ahora tu cumple tu palabra y aléjate de mi.
Salí cuanto antes de su cuarto, y me encamine al mío, me sentía como un completo idiota, por un momento creí que lo que sucedía era verdad, no aprendo de mis errores, Tom estaba mas inconsciente que consiente y había creído que yo era alguna de las mujeres con quien suele revolcarse no se como le seguí el juego, me deje llevar por el momento