martes, 13 de abril de 2010

"Imposible" ::: BY Mitu ::: capitulo 3

Capitulo 3:
Habían pasado tres días. Tres días de mis vacaciones de verano en casa.
Aunque bien podían haber sido tres años, por que se me estaban haciendo eternos.
No es que estuviera a disgusto con mi madre, o con mi padrastro... No era por ellos.
Es que Bill y yo no nos dirigíamos palabra, estabamos en un espacio demasiado pequeño como para poder evitarnos...Y el calor tampoco ayudaba. Resumiendo, que el ambiente se podía cortar con un cuchillo.
Ya había hecho algún plan para el fin de semana. Tenía que salir...
Yo de normal no hubiera necesitado que hubiera sido sábado, pero ahora estaba bajo la atenta mirada de una madre, no podía decir de salir un martes y volver a las tantas como si nada , aunque estuviera de descanso, en mi derecho, y fuera mayor de edad.
Eso explícaselo a la jefa Simone.

Estaba tirado en mi cama, con las piernas muy separadas, y los brazos igual...Aunque mi cama era pequeña y mis manos sobresalían por fuera. Debían ser las cinco de la tarde por lo menos, con un flamazo exagerado fuera.
Scotty de vez en cuando me daba un lametón en la mano. Quería jugar. Pero yo estaba abotargado.

Mi madre entró a mi habitación.
-He hecho limonada. Quieres?

Otra cosa que me hace gracia de mi madre es que te pregunta si quieres algo cuando ya te está dando el vaso.
-Mmm!Qué buena...- Dije mientras me sentaba en la cama.
-Sí...Y rica en vitamina C.
-Ya, eso también. - Rei y le di un gran sorbo. Estaba muy fría y era una bendición.
-Qué os pasa a Bill y a ti?

Mmm. Me lo temía. Tarde o temprano iba a acabar preguntando.
-...
-Os habéis peleado?
-...Bah...
-Cómo que 'bah'?
-...Sí...Hemos discutido y estamos un poco tirantes...Pero no te preocupes , mamá... Somos hermanos...Los hermanos discuten.
-Mmmm. - Debí resultarle convincente. Eso, o era una buena actriz, no como sus hijos.- Voy abajo. Y tú hijo muévete un poco, no te quedes ahí tirado todo el día.

En cuanto mamá se fue y terminé mi refresco, me volví a echar en plancha en la cama, mirando al techo. Poco a poco, me fui quedando dormido.


- - -

Necesitaba hacer lo que fuera para no pensar en lo que había descubierto. En lo que había leido.
No dudé en aceptar la invitación de Georg. Nos íbamos de caza. A un club que estaría lleno de groupies. Francesas.
El plan no sonaba pero nada mal.
Lo primero que hice al entrar al local fue pillar bebidas: alcohol a mansalva.
Llevaba mis manos llenas de vasos de tubo, y un cigarro en la boca...Y fui corriendo a que Georg me echara un cable.
No tardamos en dar con un par de rubias que prometían.
Georg me hizo un gesto cómplice. Se estaba pidiendo a la del escote; me dejaba a mi a la del trasero.
No, no recuerdo sus nombres.

Nos sentamos todos en un sofá que había en el club, cada uno tonteando con su 'chica'.
Algunos cubatas y lametones después...Oí la risa de Georg a mi lado.
-Hombre, Tom! Mira quienes han hecho acto de presencia!
Despegué a la rubia de mi oreja para mirar hacia donde me apuntaba Georg.
Se me hizo un nudo en la garganta a pesar de que empezaba a estar bastante 'contento' y mis 'luces' empezaban a ser pocas.
Gustav...Y no venía solo.
Gustav se acercó a nosotros con el otro a su lado.
-Nosotros que somos, los marginados del grupo? Había una fiesta y no nos habéis invitado? - Se quejó Gus.
-Gusi, Gusi...Que tú eres un hombre pillado...- Georg, irónico.
-Que tenga novia no quiere decir que no pueda salir con mis amigos a pasármelo bien un rato. - Fue el argumento de Gustav.
-Jajaja...- Georg se reía estúpidamente: creo que había bebido algo más que yo.
-BAH! No te necesito para nada, Musculitos...Bill y yo vamos a quemar la noche, eh, tio? - Gustav, dirigiéndose por primera vez a su acompañante.

Bill me miraba como si yo fuera a matarle y él me estuviera pidiendo que le perdonara la vida o algo así.
-Bah, uníos! Qué coño? - Georg, ahora con su momento 'exaltación de la amistad' .

Gustav arrastró a Bill para ir a pedir sus copas.
Mi acompañante femenina se me tiró al cuello y ya no hubo manera de quitármela de encima en toda la noche, aunque ahora me sentía mucho más incómodo con Bill merodeando por allí.
Empecé a beber sin filtro...Si es que en algún momento lo había tenido.

Como solo íbamos a pasar unas horas en esa ciudad, nuestro manager nos dijo que de hotel nada, que dormiríamos en el tour bus.
Como Georg y yo habíamos 'triunfado' , ya muy, muy colocados, no dudamos en llevar a nuestras chicas sin nombre a el bus.

Yo fui directo a mi litera con la rubia.
Para acabar pronto...Hablemos claro. Me la tiré como un animal. Ella es como una nube sin forma en mi memoria ahora...Lo que sí permanece son los gritos que ella no tuvo la sutileza de censurar.
Nuestro tour bus es grande. Pero no deja de ser un autobús y no estábamos solos. De no ir hasta las cejas, le hubiera dicho que se cortara un poco.
Pero no estaba yo precisamente demasiado lúcido.

Cuando terminé de follármela, ella se fue tras decirme las cuatro tonterías típicas, rollo, 'llámame si vuelves...bla bla''...y yo me levanté para ir a el WC, por que me estaban dando ganas de vomitar. Sí, romanticismo en estado puro.
Para llegar al WC tuve que pasar por la litera de Bill. Tenía la cortina echada, por lo que no podía verle.
Pero oi que estaba llorando.


- - -

Abrí los ojos. Había echado una cabezada de una hora. Uff. Seguía haciendo mucho calor.
Scotty dormía ahora en el suelo junto a mi cama. Lo sé por sus ronquidos.
Por que Scotty ronca. Lo juro.

-Toc, toc.

Miré hacia la puerta, que estaba abierta. Bill. No había llamado. Nuevamente había hecho el sonido con la boca.
Le giré la cara.
-No sabía que estabas aquí...
-Es mi habitación. - Le solté, borde.

Bill se quedó callado un minuto. Como no quería mirarle, no sé como reaccionó ante el comentario.
De repente empecé a oir sus pies arrastrase contra la madera. Atravesando mi habitación.
Me pregunté que se proponía y no me quedó otra que observarle.
Bill se había dirigido a la ventana, y ausente se quedó ahí parado unos instantes, escudriñando el exterior.
-...Antes era nuestra habitación. La compartiamos...Te acuerdas? Que dormíamos en literas...- La voz de Bill...estaba vacía.

Sí, me acordaba. Cuando éramos pequeños era nuestro cuarto, pero mamá decidió convencer a Gordon de que tiraran el estudio, y montar en su lugar una habitación solo para Bill.
Por que por la noche los dos empezábamos a jugar, y no dormíamos hasta las tantas...Ella lo descubrió por que muchas veces no nos dábamos cuenta y hacíamos mucho ruido...
Tambien recuerdo el berrinche que nos cogimos por que no queríamos tener habitaciones separadas.

No contesté a su pregunta. Él no me insistió.
-Qué coño quieres, Bill?...- Decidí romper el silencio por que me estaba poniendo muy nervioso.

Bill giró la cabeza para ahora observarme a mi. Tenía los ojos húmedos.
Comenzó a andar y se agachó junto a mi cama. Cogió a el perro en brazos.
-Scotty tiene que comer... - Las palabras se le ahogaban...

Se fue rápidamente llevándose a el chucho.

A mi también se me escapó una lágrima , que sequé al instante con el dorso de mi mano.

No podía permitirme flaquear.
No podía permitirme ser débil ahora.

Ahora las heridas estaban abiertas. Y la sal escuece en el momento.

Pero es lo que ayuda a cicatrizar.

0 comentarios: